martes, 27 de diciembre de 2011

La primera relación sexual.

No existe una edad establecida para la primera relación sexual. Sabemos que los adolescentes inician su vida sexual cada vez a edades más tempranas, inclusive entre los 13 y los 15 años de edad. En México, por ejemplo, la edad de la primera relación sexual es entre los 15 y 19 años. Vivir la primera experiencia sexual de manera exitosa requiere madurez y responsabilidad, y sobre todo, estar completamente seguro de que es el momento ideal y tu pareja sea la persona indicada.


Las relaciones sexuales significan responsabilidad compartida. Y la clave para llegar a la plenitud en el primer encuentro sexual es la información, orientación y educación. La vida íntima involucra a dos personas, y como tal, la pareja debe platicar, informarse y acercarse a un profesional en salud para aclarar dudas y temores.


Es importante tener presente que para ser responsable del cuidado de la vida de un bebé, primero es necesario ser responsable de uno mismo. Por ello, tanto el hombre como la mujer adolescente deben adoptar un método para la regulación de la fertilidad y así poder disfrutar con confianza de una sexualidad plena, satisfactoria y sobre todo, libre, responsable e informada que complemente su vida, desde la primera vez.


Definitivamente, en la primera relación sexual no puedes olvidar de tener antes información sobre tu sexualidad y condones.

martes, 20 de diciembre de 2011

Consejos sobre el acoso en el colegío

1- Cuéntaselo a alguien: a un amigo, un profesor, a tus padres, o pide ayuda a PROTEGELES a través de esta Línea de Ayuda.

2- Tú solo posiblemente no puedas hacer frente a un acoso reiterado de un grupo de compañeros. No es ninguna vergüenza pedir ayuda. Hazlo y te escucharemos.

3- Busca protección en otros compañeros: no andes solo/a; busca amigos/as con quien relacionarte.


4- Respétate a ti mismo/a y piensa que nadie tiene derecho a tratarte mal de forma reiterada y con intención de hacerte daño. Sé firme en la convicción de que tú vales tanto como cualquier otra persona.

5- Intenta no mostrar miedo. En cuanto puedas, expresa tus sentimientos a alguien en quien puedas confiar y que pueda ayudarte a buscar soluciones.

6- Hazle saber al profesor Tutor lo que te pasa y que te gustaría que se hablara de la convivencia en tu grupo clase, sin tener que centrarse en tu problema en particular.

7- Revisa si hay algunas cosas de las que dices o haces que irrita a tus compañeros o no suele gustarles e intenta cambiarlas. Practica otras formas de responder en esas situaciones concretas.

Y recuerda: Si sientes que se están metiendo contigo debes seguir una serie de pautas para protegerte. NO te quedes parado sin hacer nada. Expresa tu situación a alguien en quien confíes. PIDE AYUDA.

El miedo de hablar de amor en la adolescencia

Es común que durante la adolescencia ambos bandos, chicas y chicos, padezcan palpitaciones, sudoraciones y hasta tartamudeos ocasionales frente a la pareja que les hace alucinar. Y es que el despertar del amor en esta etapa suele coincidir con uno de los momentos definitorios de nuestro crecimiento psicológico, ese en el que solemos padecer baja autoestima e inexperiencia, dueto que nos hace vulnerables y nos coloca en el limbo del “cómo hacer”.


Aquí “echamos mano” a las herramientas aprendidas en la infancia y heredados de nuestros amigos y familiares más cercanos, son ellas esenciales para romper la inercia y convencernos de que no hay barrera que resista el entusiasmo en pos de un sueño. Basta definir la meta y enfocar las fuerzas para que las puertas terminen cediendo.

¡Te quiero!

Pero no todo es cuestión de fuerza. ¿Cómo decirle al destinatario de tus primeros suspiros de amor cuánto anhelas tenerlo a tu lado? ¿Cómo decirle que una fiesta no tiene sentido sin su compañía? ¿Cómo compartir una canción, un paseo…una ilusión…?

En momentos así suele funcionar el antiguo método epistolar: valen las cartitas de amor al estilo tradicional con letra apretada y nerviosa que un amigo desliza anónimamente bajo la puerta, o los modernos chat, email o mensajes al móvil. En todos los casos el efecto es el mismo, decir lo que pensamos sin dar la cara. La razón de tanta timidez no es el temor físico a una persona, sino a una respuesta negativa que lacere en el terreno emocional y espiritual.

martes, 6 de diciembre de 2011

La independencia de un hijo adolescente


Cuando los niños entran en la adolescencia ruegan que sus padres les den mayor libertad. En cambio los padres tienen que balancear entre su deseo de fomentar mayor confianza en sí mismos, mayor capacidad por valerse por sí mismos y el conocimiento de que el mundo puede ser un lugar muy peligroso y amenazante para la salud y la seguridad de los niños.

Algunos padres les dan demasiada libertad en ciertas cosas indebidas, o les dan demasiados privilegios antes de que los adolescentes estén adecuadamente preparados para ellos. Otros padres pecan por mantener un control demasiado rígido con los hijos, negándoles las oportunidades que necesitan para madurar y aprender a tomar decisiones por sí mismos, y aceptar las consecuencias de las mismas.

Independencia a los adolescentesLos estudios científicos nos indican que los adolescentes se desarrollan mejor cuando mantienen un enlace fuerte con sus padres pero al mismo tiempo se les permite tener sus propios puntos de vista e inclusive estar en desacuerdo con ellos. Aquí les damos algunos consejos para poder balancear entre la cercanía y la independencia:
Conceda la independencia a tu hijo en etapas.


Según vaya incrementando la madurez y la responsabilidad de un adolescente, usted puede darle mayores privilegios. Quizás al principio le dé la oportunidad de escoger sus zapatos, siempre y cuando no cuesten más de una cierta cantidad. Más tarde le puede permitir que haga sus propias compras, con el acuerdo que no le quitará las etiquetas a la ropa hasta que usted apruebe su selección. Eventualmente le puede dar una cantidad fija de dinero para que se compre la ropa a su gusto.